Jak 3 - PS2

Jak 3 es el equivalente en videojuegos al síndrome de déficit de atención. No lo decimos como una crítica, sino porque nunca se está quieto en un sitio durante el tiempo suficiente como para que te aburras.

Justo después de participar en una carrera con los monjes Precursor a lomos de un lagarto saltarín, te ves inmerso en una escena de acción rítmica dominada por el Eco oscuro. De repente, estás al mando de una enorme torreta disparando a diestro y siniestro a objetivos que saltan de la superficie del mar. Pero por poco tiempo, ya que enseguida irás a toda mecha por el desierto en un buggy mientras acabas con una horda de imponentes cabezachapas. Ah, no, espera: ahora vas a toda velocidad por un túnel esquivando abismos y robots que empuñan armas láser. Pero no te emociones, porque antes de que te des cuenta estarás deslizándote por las barandillas de un templo ancestral en una turbotabla, mientras buscas piedras preciosas llenas de energía. Digo, no, espera...

Esta aventura te dejará sin aliento, en serio. Puede que Jak 3 no cuente con la misma variedad y estilo que diferenciaba a Jak II del juego original, pero lo que está claro es que los desarrolladores han puesto a dieta a la primera continuación para despojarla de los kilitos que le sobraban. Y es que los de Naughty Dog coincidían con la crítica (y con nosotros) en que a Jak II le sobraban unas cuantas idas y venidas que, en ocasiones, distraían del objetivo final. La pieza final del misterio de los Precursor ha salido mucho más perfeccionada.